Día 7. 15 de enero de 2014
Ya han pasado 7 días, pero no 7 días cualquiera sino 7 de los mas intrigantes y misteriosos días que he vivido jamás. Y digo misteriosos porque desde
que lleguéa la gran desconocida ciudad de Turku aquel 7 de enero nunca he
sabido que es lo que iba a pasar al día siguiente y al siguiente y así hasta
hoy.
Pues he de decir que
sólo he vivido días emocionantes y divertidos...
El río Aura totalemnte congelado y al fondo la Catedral
El google maps marcaba un taller de bicis que se llama “Do
it yourself” (Hazlo tu mismo) en el que tu mismo tienes que arreglarte la bici, se supone que sin ayuda de nadie. Si alguna
vez vais, por fuera puede dar la sensación de taller clandestino de algo no muy
legal, yo en España no habría entrado a un sitio así nunca, pero realmente es
un taller de bicis.
A las 11.30 me presenté con mi bici pinchada en el taller… me pregunto qué habrán pensado los cuatro señores que trabajan en el taller! Chica, extranjera, con
una bici oxidada de más de 20 años y pinchada (todo un cuadro, como diría mi madre).
Estuvimos barajando la
posibilidad de cambiar toda la rueda pero al final por solo 2 euros he
engrasado la cadena, he hinchado las ruedas y en una de ellas he puesto una
llanta nueva.
Es decir puesta a punto para que me lleve de acá para allá durante 6 largos meses...
Es decir puesta a punto para que me lleve de acá para allá durante 6 largos meses...
Y al fin...esta es mi "nueva" bici
Y después de ésto y a pesar del frío, creo que ha sido el día más intenso desde que
llegue hace 7 días, me monté en mi bici y recorrí los 5 largos km que recorren
el borde del rio Aura desde la Catedral hasta el puerto y el Castillo Medieval al
que tuve que entrar casi por obligación ya que estaba al borde de congelarme (5
euros la entrada para estudiantes).
Castillo Mediaval de finales del siglo 13
Una de las esculturas mas famosas de la ciudad es esta cola de ballena llamada Aurajoki
Otra de las esculturas de la ciudad
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